¡Oh amor poderoso! Que a veces hace de una bestia un hombre, y otras, de un hombre una bestia.

Para el guerrero de la luz, no existe amor imposible. Ël no se deja intimidar por el silencio, por la indiferencia o por el rechazo. Sabe que, tras la máscara de hielo que usan las personas, existe un corazón de fuego. Sin amor, él no es nada.

Cada ser humano es lo que ama.

El amor infinito es un arma de potencia incomparable. Es el summum bonum de la vida. Es un atributo de los valientes. Es, de hecho, todo suyo. No está al alcance de los cobardes. No es un dogma rígido o inerme, sino una energía viva y dadora de vida. Es la cualidad propia del corazón.

No necesitamos bombas ni armas. El amor es nuestra arma: el amor hacia los leprosos, los ancianos, los moribundos, los paralíticos; hacia todos aquéllos que no tienen a nadie y a quienes nadie ama.

El amor no se mira, se siente, y aún más cuando ella está junto a ti.

No ser amado es una simple desventura. La verdadera desgracia es no saber amar.